'Compostela History X' II
Jueves 9 de octubre, la 'Roja' pierde 1-0 con la selección eslovaca a falta de 15 minutos para el final del encuentro. Hoy ha sido un día largo y productivo; uno de esos días que te dejan buen sabor de boca. Pero todo ha terminado, normalmente las semanas finalizan los viernes a media mañana cuando la puerta del aula de informática se abre de par en par, dando por terminada la clase.
Sin embargo, hoy es uno de esos jueves. A mí derecha, en el sofá, Nane da el último sorbo de la Shandy de Estrella Galicia; más allá, sentado plácidamente en el sillón, Óscar analiza el juego de nuestra selección. Ajeno al drama futbolístico, mi primo ejecuta sus maravillosas maniobras de fritura patatil. En 10 minutos Eslovaquia se ha puesto 2-1. Fútbol es fútbol.
Dentro de un rato, cuando concluya "la fiesta del fútbol", comenzará otro espectáculo. Reconocido casi a nivel mundial, el "jueves compostelano" nunca defrauda, a pesar del deterioro del mismo en los últimos años. Las Red Vintage, esas que tanto le gustan a mi padre, están en el congelador. De él aprendí que tan importante como una cerveza fresquita, es una copa bien fría, aunque esta vez se me ha olvidado meterlas en el frigorífico. Me gustaría también poder degustar esta bebida como lo hace él, con ese sentido del gusto tan desarrollado. Por el momento me conformo con que esta noche no defraude... y bien seguro que no lo hará.
@juandavila45
Sin embargo, hoy es uno de esos jueves. A mí derecha, en el sofá, Nane da el último sorbo de la Shandy de Estrella Galicia; más allá, sentado plácidamente en el sillón, Óscar analiza el juego de nuestra selección. Ajeno al drama futbolístico, mi primo ejecuta sus maravillosas maniobras de fritura patatil. En 10 minutos Eslovaquia se ha puesto 2-1. Fútbol es fútbol.
Dentro de un rato, cuando concluya "la fiesta del fútbol", comenzará otro espectáculo. Reconocido casi a nivel mundial, el "jueves compostelano" nunca defrauda, a pesar del deterioro del mismo en los últimos años. Las Red Vintage, esas que tanto le gustan a mi padre, están en el congelador. De él aprendí que tan importante como una cerveza fresquita, es una copa bien fría, aunque esta vez se me ha olvidado meterlas en el frigorífico. Me gustaría también poder degustar esta bebida como lo hace él, con ese sentido del gusto tan desarrollado. Por el momento me conformo con que esta noche no defraude... y bien seguro que no lo hará.
@juandavila45
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